Ecopetrol en Crisis: El Retroceso en Gobernanza y su Impacto en la Confianza Empresarial

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Ecopetrol, la joya de la corona del sector energético colombiano, está atravesando una crisis que podría tener repercusiones mucho más profundas de lo que se imagina. En el ranking de gobernanza corporativa de Merco para 2024, la empresa petrolera estatal sufrió un desplome alarmante, cayendo del puesto 27 en 2023 al puesto 49 este año. Este retroceso no solo es simbólico; refleja una serie de problemas internos que están afectando tanto la percepción pública como la estabilidad financiera de la compañía.

Uno de los factores más preocupantes de esta caída es el descenso en el pilar del gobierno corporativo y ética, donde Ecopetrol se ubicó en el puesto 49, con una pérdida de 22 posiciones frente al año anterior. Este indicador es crucial, ya que no solo mide la capacidad de la empresa para operar de manera eficiente y transparente, sino que también refleja la confianza que los inversionistas, empleados y la sociedad tienen en su gestión. La caída en este aspecto podría ser un reflejo de decisiones cuestionables y falta de liderazgo claro dentro de la compañía.

El ranking Merco Responsabilidad ESG (medioambiental, social y de gobernanza) es una referencia clave, ya que toma en cuenta las opiniones de miles de directivos, expertos y trabajadores. En su edición de 2024, Ecopetrol, que previamente se encontraba en el puesto 8 a nivel global, cayó al puesto 16. Este retroceso es un indicio de que los cambios en la gobernanza de la empresa no han sido bien recibidos ni por los directivos ni por la comunidad empresarial en general. La pregunta es inevitable: ¿qué está sucediendo al interior de Ecopetrol que ha provocado esta caída tan dramática?

Un factor que no ha pasado desapercibido es la gestión de Ricardo Roa, quien ha sido protagonista de varios escándalos en los últimos meses. Los anuncios apresurados y la volatilidad de las acciones de Ecopetrol, junto con la falta de una estrategia clara y coherente, han alimentado la sensación de incertidumbre. Esta situación ha sido observada por diversas calificadoras, que han señalado el debilitamiento del gobierno corporativo de la empresa. A finales de 2023, Fitch Ratings mantuvo las calificaciones de crédito positivas para Ecopetrol, pero advirtió sobre el creciente problema de gobernanza que podría afectar a largo plazo la estabilidad financiera y reputacional de la compañía.

El debilitamiento del gobierno corporativo en Ecopetrol no es un tema menor. La empresa, al ser estatal, tiene una responsabilidad particular hacia los colombianos. La falta de transparencia, la toma de decisiones erráticas y los cuestionamientos sobre la forma en que se ha manejado la estructura interna de la compañía son elementos que no solo afectan su desempeño financiero, sino también su legitimidad ante la sociedad. La caída en el ranking de Merco refleja este malestar generalizado, que se extiende más allá de los analistas y llega incluso a los empleados y a los consumidores.

Es importante mencionar que el gobierno corporativo no solo se trata de políticas internas o estructuras organizacionales; también implica una gestión ética y responsable. Las expectativas sobre Ecopetrol, como empresa estatal, son mayores debido a su impacto en la economía nacional y en el bienestar de los colombianos. En este contexto, las decisiones equivocadas y la falta de una visión clara pueden tener un efecto cascada, afectando no solo la imagen de la empresa, sino también su capacidad para competir en un mercado global cada vez más exigente.

A medida que los problemas internos se hacen más evidentes, la respuesta de Ecopetrol será crucial para determinar si puede recuperar su posición. Para ello, será necesario un proceso de reforma profunda en su estructura organizacional, en la toma de decisiones y en la comunicación con sus diferentes grupos de interés. Un enfoque renovado en la transparencia, la ética y la sostenibilidad podría ayudar a la empresa a recuperar la confianza perdida y a mejorar su desempeño en los rankings futuros.

En este contexto, la caída en el ranking de Merco de Ecopetrol debe ser vista no solo como una caída en números, sino como un llamado de atención sobre la importancia de la gobernanza corporativa en las empresas, especialmente en aquellas que tienen un impacto directo en el desarrollo del país. Ecopetrol no puede permitirse seguir con un gobierno corporativo débil y decisiones erráticas si desea mantener su relevancia como actor clave en la industria energética y su compromiso con el progreso de Colombia.